Actualmente
vivimos en un mundo globalizado, donde podemos caracterizar a la sociedad, como una sociedad de la información, ya que nos encontramos impregnados por la tecnología, la información y la comunicación. Pero cuando afirmamos esto cabe preguntarnos ¿Realmente estamos comunicados? ¿Estamos realmente informados? y es aquí donde se crea un conflicto debido a que nos encontramos ante un exceso de información (infoxicados); es tanto lo que tenemos a nuestro alcance que sumando a la aceleración, a la rapidez y la inmediatez con la que vivimos, se puede argumentar, que no sabemos todo sino que muchas veces este acceso nos deja ante la ignorancia, en la incultura.
A demás muchas veces no nos comunica sino que aleja a las distintas generaciones, es así que las nuevas generaciones, se encuentran en la TECNOFILIA, son nativos de las nuevas tecnología, se caracterizan por el exceso y desmedida ante el uso de estas, estan inmersos en el ámbito privado, pierden la participación ciudadana; y por el contrario tenemos a las generaciones mayores que se encuentran en la TECNOFOBIA, caracterizadas por el rechazo y la desconfianza.
Sin embargo, no podemos negar que la tecnología en relación con los avances científicos brindan una mejor calidad de vida, porque nos permiten compartir la cultura, la democratización, generar nuevas culturas, distribuir información, entre otras; tomando esta postura podemos afirmar que en realidad las nuevas tecnologías nos ofrecen ventajas y posibilidades para nuestro cotidiano, pero es el hombre el que no sabe hacer uso de ellas, que no tiene una educación para poder hacer el uso correcto de estas.